La mayoría de las personas piensan que si tenemos, podremos hacer algo para luego finalmente ser lo que soñamos. Hemos escuchado decir muchas veces: “Cuando sea gerente podré liderar como yo quiero”, “Cuando tenga dinero me daré esas gran vacaciones” “Cuando tenga tiempo me perfeccionaré en ese tema”.
Habitualmente las personas nos trazamos objetivos y metas entre las que se encuentran ganar mucho dinero, aprender idiomas, conocer distintos lugares del mundo, tener la mejor marca de auto o el último de los modelos de celular. Muy pocas veces escuchamos que el objetivo de una persona sea el SER mas feliz, o SER una persona orientada a los VALORES.
En esta sociedad marcada por el consumismo estamos estamos obsesionados en el HACER Y TENER, pareciera que quien tiene más es el que lidera a los demás. De hecho, aquél que tiene más cosas materiales es considerado de mayor valor que el que no tiene tanto, por ejem dinero, posesiones, muchas tarjetas de créditos, mejor ropa, etc,etc.
Por otro lado también admiramos a aquellos que logran grandes cosas, como a un actor/triz famoso/a, un/a abogado/a o conductores de TV exitosos o personas que son bailarines excelentes, deportistas de éxito, etc, etc.
COMO PODEMOS NOTAR NUESTRA MIRADA SE ENFOCA EN EL HACER/TENER Y MUY POCO EN EL SER QUE SOMOS!
“La felicidad es interior, no exterior; por ello no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos” Henry Van Dyke
Debemos comenzar por el SER, luego el HACER y más tarde TENDREMOS. Si tú quieres llegar a alcanzar una posición de gerencia en tu lugar de trabajo, debes primero trabajar en tu ser: ¿Cómo piensa un gerente? ¿Qué libros puedo leer que me ayudarán a pensar así? ¿Cómo se viste? ¿Cómo actúa? ¿A qué hora llega a la oficina? Cumple su palabra? Es honesto? Se pone en el lugar del otro?
Si quieres llegar a ser un gran vendedor y superar tus metas, puedes preguntarte cosas como ¿Cuáles son las características de un gran vendedor? ¿Cómo trata a la gente? ¿Cómo me puedo convertir en una persona atractiva para los demás? ¿Cómo hablar correctamente? Todas estas son preguntas enfocadas en el SER.
La diferencia con las personas que alcanzan el éxito en cualquier área de sus vidas, es porque estas trabajan con el SER, ES POR ELLO QUE LOS GRANDES LÍDERES SON BUENOS LECTORES, SIEMPRE QUIEREN APRENDER, CRECER Y CAMBIAR.
Cualquier cosa que valga la pena en la vida se debe pagar el precio de obtenerla. Independientemente de como definamos el éxito (dinero, ser buen padre, esposo, llegar a altos cargos en tu organización o una relación buena con Dios) vas a tener que comprometerte con acciones específicas, de manera constante y por un largo período de tiempo. ¿Por qué sólo el 5 o 10% de las personas son realmente exitosas?? Porque estas están dispuestas a pagar el precio.
Es la gota cayendo sobre la roca por años lo que logra partirla en dos. No hay atajos, no hay camino fácil. El camino es duro, y los duros son los que se mantienen en el camino. Por supuesto que puedes aprender a ser más eficiente, aprender de los errores, aprovechar las oportunidades que la vida te presente… pero a la final, vas a pagar un precio.
El “TENER” no “PRODUCE” el “SER”, sino todo lo contrario.
Les dejo un famoso cuento para que reflexionemos y trabajemos nuestro “ SER” en lugar de nuestro “TENER”.
Ayer falleció la persona que impedía tu crecimiento
Un día, cuando los empleados llegaron a trabajar, encontraron en la recepción un enorme letrero que decía:
“Ayer falleció la persona que impedía tu crecimiento en esta empresa. Te invitamos al velorio. Es en el almacén”.
Al principio todos entristecieron por la muerte de uno de sus compañeros. Pero después comenzaron a sentir curiosidad por saber quién era esa persona que estaba impidiendo el crecimiento de todos.
La agitación en el área del velorio era tan grande que fue necesario llamar a los de seguridad para organizar la fila de visitantes.
Conforme las personas iban acercándose al ataúd, la excitación aumentaba: ¿Quién será el que estaba impidiendo mi progreso?… ¡Qué bueno que murió ese infeliz…
Uno a uno, los empleados agitados se aproximaban al ataúd, miraban al difunto y tragaban saliva.
Se quedaban unos minutos en el más absoluto silencio, como si les hubieran tocado lo más profundo del alma.
Pues bien, en el fondo del ataúd había un espejo: Cada uno se veía a si mismo, con el siguiente letrero:
Sólo existe una persona capaz de limitar tu crecimiento: Tu.
Tú eres la única persona que puede hacer mejoras en tu vida. Es tu decisión.
Tu eres la única persona que puede perjudicar tu vida, y tu eres la única persona que se puede ayudar a si mismo. La decisión es tuya.
Tu vida no cambia cuando cambia tu jefe, cuando tus amigos cambian, cuando tus padres cambian, cuando tu pareja cambia.
Tu vida comienza a cambiar cuando tu decides hacerlo. Es en tu decisión en donde está la diferencia.
Tu eres el responsable: Puedes decidir ser indiferente o puedes decidir hacer mejoras.
El mundo es como un espejo que devuelve a cada persona el reflejo de sus propios pensamientos, de sus propios actos y de sus propias decisiones.
No busques responsables a los lados. Míra la imagen que se refleja en tu espejo.
TU CAMBIO COMIENZA POR TI MISMO
Miguel Siufi
